Llegó el día. Arrancaron los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 y el béisbol fue el deporte que abrió la cita en el diamante del Parque Bicentenario de Cerrillos.
Chile, que debutaba en este deporte en un evento de esta categoría, sufrió y pagó caro el noviciado ante México.
Fue un expresivo 16-0 para los aztecas por el Grupo A, que también integran República Dominicana y Panamá. México exhibió toda su jerarquía en Cerrillos, ganando con holgura y demostrando la razón del porqué son el tercer mejor equipo del mundo.
Un resultado a priori esperable, ya que el mismo capitán chileno Manuel Zapata había evidenciado los problemas que tuvieron en la preparación.
“Pedimos la cancha de Cerrillos para conocerla, hacer una práctica, saber cómo es nuestro estadio, pero ni eso nos permitieron. Entrenamos solo en las giras, nos concentramos ahí, en un estadio que no conocemos y el equipo se conoce recién ahí, después de que salen y entran jugadores.
¿La última vez? Fue en Brasil hace como un mes y después no nos juntamos más hasta que comiencen los Juegos. ¿Qué equipo o selección de Chile hace eso?”, dijo a El Mercurio hace un par de días.
Y sumó en ese momento: “La verdad, no sabemos qué espectáculo vamos a dar, porque este equipo se formó ahorita. Antes había otro equipo, nos estábamos preparando, pero se desintegró y se armó este nuevo.
No nos conocemos bien, estamos en eso. Creemos que nadie nos apoya, como que dicen ‘prepárense para hacer el ridículo’ y eso no nos motiva. Tenemos la motivación de representar a Chile, deberíamos tener una fanaticada, pero no la tenemos. Nos toca demostrarles que sí podemos y luchar hasta el final”.