Demostrando la innovación en su quehacer pedagógico, junto con reflexionar sobre lo aprendido en el aula y las experiencias obtenidas tras su paso por los distintos centros educativos de Malleco, más de una treintena de estudiantes de último año de técnico de nivel superior (TNS) en Asistente en Educación de Párvulos rindieron con éxito su ansiado examen final de práctica profesional.
Realizada en el Salón Auditorio, la actividad fue organizada por la docente de la asignatura, Verónica Cáceres, quien también invitó a las académicas de la carrera y a la jefa subrogante de la especialidad, Belén González; además de las unapinas de primero y tercero, a fin de pudieran visualizar y generar sus futuras experiencias, involucrando todos los conocimientos adquiridos en la casa de estudios superiores.
En la oportunidad, las universitarias efectuaron diversas presentaciones grupales, en donde expusieron acerca de los establecimientos en los que trabajaron en Victoria, Ercilla y Traiguén; abordando contenidos como el Proyecto Educativo Institucional (PEI), el rol del educador, el marco para la buena enseñanza y la planificación, entre otros; dando cuenta de la labor desarrollada por dichas instituciones formadoras.
De acuerdo con Belén González, “las TNS manejan los conocimientos necesarios para el ingreso al mundo laboral, manteniendo un lenguaje técnico muy elevado, lo cual da cuenta de lo entregado por los académicos durante su formación”, siendo una “experiencia satisfactoria en cuanto al conocimiento del trabajo de nuestros centros de práctica y de cómo las estudiantes demostraron todo lo que realizaron en sus 234 horas presenciales de práctica final”, afirmó.
La instancia también contó con un número artístico a cargo de Camila Pizarro, hija de una de las universitarias de último año e integrante de la Academia Municipal de Ballet Clásico Tiny Dancer, quien deleitó a los asistentes con una danza contemporánea, marcando un momento especial durante la jornada.
El examen final de práctica profesional fue profundamente valorado por las unapinas, como Mary Spencer, asegurando que “dimos a conocer aquello para lo que nos preparamos durante estos dos años y medio de carrera, en donde demostramos ser capaces de trabajar en equipo, de estar capacitadas para cumplir un rol importante dentro de los centros educativos, que nuestra labor no es solo entretener a los niños sino entregar aprendizajes significativos a través de distintas experiencias y de ser agentes de cambio para la educación inicial”, junto con “agradecer por este espacio a los distintos centros de práctica que abrieron sus puertas para que nosotras pudiésemos probar nuestras competencias y habilidades durante todo este período”, además de mostrarse orgullosa por el desempeño de su hija durante el número de danza en la actividad.