Neimar Claret Andrade
Un nutrido grupo de profesores de distintos liceos y escuelas de Angol, marcharon ayer miércoles 31 de mayo, detrás del estandarte del Colegio de Profesores, con el objetivo de reclamar sus derechos y entregarle, a la delegada presidencial provincial de Malleco, Andrea Parra Sauterel, una carta con los ocho puntos que ellos consideran que debe honrar el gobierno con su gremio.
Los manifestantes, al ritmo de silbatos y batucadas, salieron desde la plaza Busnter, pasaron frente a la Delegación Presidencial, fueron hasta la Municipalidad de Angol y volvieron a la Delegación para entregar la carta antes mencionada.
El secretario comunal del Colegio de Profesores en Angol, José Del Campo, dijo que con esta nutrida marcha “los profesores han demostrado su compromiso con la educación y con toda la problemática que en este momento estamos teniendo como docentes y se han sumado a esta marcha convocada por el nivel nacional”.
Al ser consultado sobre cuáles son sus principales exigencias, detalló que tienen pendientes ocho temas que se han ido conversando con las autoridades gubernamentales, pero que aún no han obtenido respuestas satisfactorias y acotó que lo más relevante para ellos es la deuda histórica que mantiene el Estado con los profesores mayores.
Del Campo afirmó que esperan “que este año podamos llegar, ojalá, a un acuerdo con el gobierno actual para que pueda, de alguna forma, entregar algún beneficio a los profesores que ya no están activos; sabemos que es muy complejo que la deuda histórica se pague en su totalidad, pero si se puede hacer un gesto y, además, fue un compromiso de campaña que hizo el presidente Boric antes de ser elegido”.
El secretario comunal del Colegio de Profesores de Angol dijo, además, que otro de los puntos de la carta entregada a Andrea Parra, tiene que ver con el agobio laboral “no solamente de parte de la jefatura, sino que también tiene mucho que ver con el nivel de violencia que se está viendo en todos los establecimientos educacionales de nuestro país; nosotros en Angol no hemos tenido agresiones físicas directas, pero si hemos estado bastante cerca de eso y en algunos colegios se ha llegado a amenazar de muerte a algunos colegas, esperamos que no se llegue a lo físico, pero tener ese tipo de violencia psicológica para nuestros colegas es bastante complejo”.