Andrea Jaque
Desde las 8:00 hasta las 19:00 horas, con control de asistencia mediante huella digital y un formato riguroso, los participantes , algunos provenientes de Angol, Lumaco y Curacautín, se sumergen en contenidos complejos que les permitirán operar maquinaria pesada y en enero, optar a la licencia correspondiente. Para varios, el curso implica alojamiento en el recinto militar, reforzando el carácter inmersivo y profesional de la experiencia.
Esta alianza pionera entre la Dirección del Trabajo, SENCE, Defensa Civil, OTEC Gema Chile, el Regimiento Logístico y la Dirección de Tránsito, no sólo entrega herramientas técnicas, sino que abre puertas concretas a la empleabilidad. “La idea es no quedarse solo con el curso”, enfatizan los organizadores, conscientes de que esta formación puede significar un antes y un después en la vida de los participantes.
Carolina Ojeda, Directora Regional de la Dirección del Trabajo, recordó que la iniciativa se gestó el 2 de mayo, motivada por la inquietud de cómo proyectar las competencias adquiridas en la Defensa Civil hacia el mundo laboral. “Se consiguieron recursos impensados. Felicito a la Defensa Civil. Esta es la primera capacitación en este contexto a nivel país”, señaló, destacando el valor de la articulación interinstitucional.
Las voces de los alumnos reflejan la esperanza que impulsa esta formación. Uno de ellos, estudiante de mecánica automotriz, desea trabajar en camiones de combustible. Otro, técnico mecánico, aspira a desempeñarse en faenas mineras. Incluso una mujer participante, consciente de los temores que muchas enfrentan ante cursos tradicionalmente masculinizados, se declara decidida a aprender sin miedo.
El Comandante Carlos Pérez, a cargo de la sede local de la Defensa Civil, expresó con convicción: “Nos atrevemos porque sabemos que tenemos buenos elementos y también sabemos que hay que entregar algo positivo a jóvenes que en muchas ocasiones son el sustento de su hogar”.
Este curso no sólo capacita: dignifica, proyecta y transforma. En palabras de Carolina Ojeda, “permite mirar de otra forma la formación”. Y desde Victoria, los voluntarios de la Defensa Civil se convierten en referentes de una nueva forma de construir futuro.

