Neimar Claret Andrade
El alcalde de Collipulli, Manuel Macaya manifestó desde Temuco, que llegará, de ser necesario, hasta la Corte Suprema por el inconveniente que se está presentando en su comuna con respecto a la recolección de basura.
La decisión es el resultado de que la Contraloría Regional de La Araucanía ordenara invalidar la licitación de la empresa recolectora de los desechos, luego de hallar un vicio de fondo en el proceso licitatorio relacionado con los camiones que ofrecieron las empresas oferentes.
“Hay gestiones pendientes todavía por hacer —precisó— nosotros vamos a llegar hasta el final del procedimiento, hasta la Corte Suprema vamos a llegar con esa situación; le quiero dar a conocer a la comunidad que hay comisiones, cuando se evalúan las licitaciones públicas y hoy día la comisión encontró, cuando la empresa postuló, ofreció maquinarias, camiones del último año y lamentablemente cuando ingresaron los antecedentes, la comisión revisadora encontró que los antecedentes no iban en la documentación de la empresa y por eso esa empresa quedó fuera, eso fue lo que pasó, pero aquí no ha habido ningún hecho grave”.
Asimismo, el jefe comunal indicó que “acá no hay ninguna información que se le esté ocultando a la comunidad; los concejales, ellos viven de la política, ellos están haciendo algo sucio, están empañando la imagen mía, de la administración de la Municipalidad, pero acá no hay nada ilícito, no hay nada irregular, sólo hay que esperar que el tribunal diga y si hay algo que esté malo se va a modificar y se va actuar como corresponde”.
Los hechos
Como se recordará, Cosemar y Servimar se presentaron como empresas oferentes del servicios de recolección de basura ante el gobierno municipal collipullense, el cual comenzó su proceso de evaluación, para ver si lo que proponían las empresas cumplía o no con lo indicado en las bases de la licitación.
En este contexto, en el punto N° 18.2 de las bases administrativas se fijaba en la tabla de evaluación el criterio “año de los camiones”, el cual equivalía a 25 % de la calificación final. Para ello, se estableció que el puntaje estaría directamente relacionado con el año de fabricación de las máquinas.
De esta manera, los camiones fabricados entre los años 2014 y 2015 se evaluarían con 5 %; los de 2016 y 2017, con 10 %; de 2018 y 2019, con 15 %; y entre los años 2020 y 2021, con 25 %. Además, las bases dejaban establecido que las ofertas de camiones previos al año 2014 serían rechazadas y las de años distintos se promediarían, no haciendo mención al año 2022 en curso.
En este ítem la oferta de Cosemar incluía camiones y vehículos nuevos, cero kilómetros, del año 2022, ya que estos se adquirirían una vez adjudicada la concesión. Por su parte, la empresa Servimar ofrecía camiones usados, del año 2020.
La revisión de ambas ofertas significó que el municipio de Manuel Macaya le otorgara una nota 0 a Cosemar, aunque ofrecía camiones nuevos, mientras que Servimar se quedó con un puntaje de 25, a pesar de que los camiones ofrecidos eran usados, situación que terminó por inclinar la balanza a favor de la segunda empresa, pues en los otros ítems mantenían una puntuación similar.Y es que con 25 % a 0 % en contra por “año de los camiones”, el resto de los criterios evaluados fueron los siguientes: en “precio”, Cosemar obtuvo 49,83 % y Servimar 50 %; en “cumplimiento de formalidad de la oferta», ambas empresas se quedaron con 10.%; y en “condición de empleo y remuneración”, Cosemar S.A. recibió 15 % contra 2 % de Servimar.
La Contraloría confirma que Cosemar “cumplió con el correcto llenado del formulario”, al adjuntar la aclaración de que los camiones serían del 2022 y adquiridos una vez adjudicada la licitación, sin embargo, la Municipalidad de Collipulli argumentó su decisión de no otorgarle puntaje (0 %) explicando que “se exigía acompañar el padrón de los camiones, lo que dicha empresa no pudo cumplir por tratarse de vehículos que aún no serían adquiridos”.Una vez analizados todos los antecedentes, el ente que fiscaliza a los órganos del Estado determinó que la exigencia del Municipio de Collipulli, en orden a requerir que los oferentes cuenten con los vehículos antes de la adjudicación, “transgredió el principio de libre concurrencia de los oferentes”.
Tras analizar lo planteado por la Contraloría, la Unidad Jurídica de la Municipalidad presentó un recurso de protección en contra de la resolución administrativa y una orden de no innovar que, en principio, fue concedida por la Corte de Apelaciones, es decir, se invalidaron temporalmente las acciones relacionadas con el dictamen de la Contraloría hasta tanto el Tribunal de Alzada no conociera en su totalidad todos los antecedentes, es decir, habilitó a la Municipalidad para seguir adelante con el contrato con la empresa que se adjudicó la licitación.
Sin embargo, la Corte de Apelaciones rechazó el recurso de protección que ahora irá a la Corte Suprema, mientras que el servicio de recolección se seguirá prestando.