El asesinato frustrado de Cristina Fernández sigue su proceso en la justicia de Argentina. El caso suma una tercera persona detenida, vinculada al atentado del 1 de septiembre en el barrio Recoleta de Buenos Aires. Las pericias a los teléfonos personales de los sospechosos permiten ampliar la investigación de la fiscalía.
Se sabe que el brasilero Fernando Sabag hizo los dos disparos fallidos frente al rostro de la vicepresidenta argentina. También que junto con su pareja Brenda Uliarte estaban planificando de antemano el ataque. Los investigadores ahora se enteraron que el 27 de agosto hicieron un intento previo del asesinato.
El sábado llegaron hasta donde vive Cristina Fernández y a último momento abortaron el ataque. Los mensajes den WhatsApp muestran que Sabag y Uliarte estaban enojados por no poder disparar contra la vicepresidenta. Su plan era poner en práctica lo que comentaban en grupos de internet de la extrema derecha.
Uliarte vendía algodón de azúcar en las manifestaciones y era parte de la “Banda de los copitos”, que se vincula al dueño de la bombona de gas con que hacen los algodones. Ese grupo descarta estar relacionado con el intento de magnicidio. Los mensajes de Brenda Uliarte ayudan a ver los planes para el atentado.
El medio Página 12 da cuenta que por esos mensajes fue arrestada una de sus amigas, una joven de apellido Díaz. Es la tercera persona detenida por el ataque contra Fernández. En el teléfono de Uliarte también se encontraron fotos de Sabag con el arma y las tareas de inteligencia para preparar el ataque en la capital de Argentina.