Jesús Leonardo Núñez
En el sector La Fusta, de la comuna de Lonquimay, fue quemada una camioneta durante la noche del viernes. Este sábado al amanecer, una comitiva policial fue a inspeccionar el lugar de la quemazón, donde fueron salvajemente recibidos.
La conductora de la camioneta, según los antecedentes aportados, no pudo llegar a una bencinera para recargar el tanque, por lo que se vio en la necesidad de abandonarla momentáneamente, mientras buscada a su hijo para que la ayudara.
La decisión posiblemente le salvó la vida, aunque le costó su vehículo que desconocidos, y por razones que solo se explican desde la óptica de la demencia criminal, quemaron hasta reducirla en cenizas.La dama en cuestión, al regresar debidamente acompañada al lugar donde dejó su vehículo, se topó con la sorpresiva y desagradable situación incendiaria y de inmediato dio aviso a las autoridades.
Tristemente le respondieron varias horas después de lo sucedido y casi al amanecer del sábado, una patrulla llegó al lugar, ubicado entre La Fusta y Quinquén, donde detectaron también un camión obstaculizando el paso y la camioneta más adelante.
De inmediato, un grupo de posibles malvivientes procedieron a lanzar piedras y palos. Los funcionarios, superados en número y fuerza, optaron por retirarse antes que usar su armamento y arriesgar problemas judiciales, dadas las actuales limitaciones operativas que enfrentan las instituciones armadas.
La Fiscalía ordenó que la situación fuera investigada con luz de día y se solicitó resguardar el sitio del suceso y se realicen las pericias de rigor.
Las investigaciones también apuntan a determinar si, dadas las características del ataque contra los uniformados, se trate de una situación de violencia territorial.