Neimar Claret Andrade
Aunque estaba agendada para este lunes 31 después de que fuera suspendida el pasado 3 de julio, el Juzgado de Garantía de Angol suspendió nuevamente la audiencia de formalización prevista en contra de 17 comuneros mapuche presuntamente implicados en el secuestro de tres gendarmes perpetrado, el pasado 7 de mayo, en la Cárcel de Angol.
El fiscal de Alta Complejidad, Carlos Cornejo, explicó que con los antecedentes del caso el Ministerio Público solicitó en el mes de mayo la audiencia de formalización, la que se agendó para el pasado 3 de julio, fecha en la que se debió suspender por dificultades con el traslado de algunos los reos implicados y se reagendó para este lunes 31 de julio.
“El día de hoy, producto de circunstancias que se alegaron por parte de las defensas y que dicen relación, entre otras cosas, con el espacio físico del tribunal que impedía el desarrollo de la audiencia, producto de lo reducido del espacio para albergar a la cantidad mínima de personas que debía estar presente, es que, en definitiva, se suspendió la misma, debiendo fijarse por el tribunal una nueva fecha, una vez que se mantengan ya los antecedentes técnicos que permitan establecer cuál será el lugar específico en que se pueda desarrollar bajo las condiciones mínimas que resguarden los derechos y garantías de todos los intervinientes”.
El fiscal Cornejo aclaró que la postura del Ministerio Público era trasladar la audiencia a otra de las salas que se encuentra en las mismas dependencias del Juzgado de Garantía de Angol y que bajo esa situación la audiencia podría, desde su perspectiva, haberse desarrollado ayer mismo.
Es importante señalar que el tribunal tiene 3 días para generar un informe en relación con el lugar en el que se desarrollará la audiencia.
“Esto es público”Con gritos de “esto es público”, refiriéndose a la audiencia, un grupo de comuneros que se apostaba a las afueras de la sede angolina del Poder Judicial utilizó la fuerza para abrir los portones que mantenían cerrados los funcionarios de Gendarmería que custodiaban a los comuneros que iban a estar en la audiencia, tanto los de las afueras, como los del interior del recinto judicial y entraron a la audiencia, por decenas, abarrotando el recinto.
Todo comenzó luego de que uno de los efectivos de Gendarmería permitiera el ingreso del lonko de Temucuicui, Víctor Queipul e intentara cerrar el portón exterior detrás de él, pues alegó que no tenía órdenes de dejar pasar a nadie más, aunque, previamente, se había solicitado el ingreso de varios werkenes que allí se hallaban.
Cuando el funcionario intentó cerrar el portón los ánimos se caldearon y los comuneros que permanecían afuera forcejearon con los gendarmes para abrir el portón, lo cual hicieron. Las primeras que ingresaron fueron las mujeres, quienes iban empujando a los funcionarios y gritando y procedieron a forcejear para abrir una reja que hay frente a las puertas de vidrio del tribunal y que habían cerrado, pero ésta también la abrieron e incluso una de las damas, tomó uno de los escudos transparentes antimotines usados por las autoridades y lo lanzó hacia la calle, lo que estuvo a punto de caerle en la cabeza a esta redactora.
Mientras esto sucedía, varios comuneros hombres empezaron a gritarle a los representantes de los medios de comunicación a quienes se les encimaron con palines en mano y los obligaron a replegarse hacia la esquina de la calle Dieciocho con Lautaro para resguardarse.
Después de eso, los comuneros controlaban el ingreso por el portón exterior al recinto judicial.Los hechosLos hechos relacionados con este caso se desarrollaron el pasado 7 de mayo en el módulo F de la Cárcel de Angol, en donde los reos, todos de la etnia mapuche, retuvieron a tres funcionarios de Gendarmería en protesta por la suspensión de visitas en el recinto penitenciario durante aquella jornada, en la que se realizó la elección del Consejo Constitucional, suspensión que les fue comunicada el jueves anterior.
Los tres gendarmes afectados quedaron atrapados en una habitación contigua gracias a las acciones desplegadas por algunos internos, lo que motivó un operativo especial para su rescate, que se logró después de casi una hora y media de reclusión.
Luego de estos hechos, 17 internos, entre condenados e imputados que cumplían su medida cautelar de prisión preventiva, fueron trasladados hasta diferentes penales del país, aunque posteriormente la mayoría de ellos fueron devueltos a la Cárcel de Angol.
El Ministerio Público los formalizará por el delito de secuestro calificado.