Jesús Leonardo Núñez
El terrorismo en la provincia de Malleco está rabioso y no respeta ninguna instancia. Luego del duro golpe perpetrado en Pidima contra un templo evangélico, se perpetró otro atentado, esta vez en la comuna de Curacautín.
La escuela San Arturo, ubicada en la ruta CH-181, a la altura del kilómetro 46, fue atacada y quemada hasta quedar en escombros, a pocas horas de los hechos ocurridos en la comuna de Ercilla.
Eran aproximadamente la 1:30 de la madrugada de este miércoles, cuando el personal de guardia de la Quinta Comisaría de Curacautín recibió la novedad a través de una llamada al 133, sobre el crimen que se estaba desarrollando en el referido plantel educativo.
El mayor Fernando Mella, de la Prefectura Malleco, indicó que el recinto educativo quedó lamentablemente en ruinas e irreconocible reducido a solo cenizas que dejó. El mismo funcionario y su facción, pocas horas antes había estado en Ercilla verificando otra situación similar en la que aparte de una iglesia, también resultaron afectados por el fuego una residencia y un vehículo de transporte de personal agrícola.
El carabinero también advirtió que no hubo personas afectadas en este nuevo incidente, del cual también es responsable una organización de la causa mapuche, debido a que en la cercanía de la escuela dejaron un lienzo advirtiendo nuevas acciones violentas y exigiendo medidas que beneficien a los presos mapuche.
“Se pudo verificar que a un costado de esta escuela hay una capilla de nombre San Francisco, la que de igual forma quisieron quemar, pero fue controlado el fuego gracias al trabajo de bomberos”.
Mella informó adicionalmente, que de esta situación destructiva fue notificada al Ministerio Público, que designó para las respectivas investigaciones a la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la PDI.