Redacción”No bajaré los brazos hasta que nuestra comuna tenga su propia sede de la PDI”, así reaccionó el alcalde Manuel Macaya Ramirez, como consecuencia del reciente atentado incendiario en espacio collipullense.
El martes al comenzar la noche, el conductor de un camión que transportaba maquinaria agricola fue sometidos por delincuentes quienes le quemaron su móvil y medio de trabajo. El hecho generó la indignación del gerente municipal.
“Quiero expresar una vez más mi molestia reiterando la necesidad de un cuartel de la Policía de Investigaciones para Collipulli. Los delitos continúan y siguen aumentando”. Un cuartel que, según trascendió en varios medios, fue rechazado por el Gobierno nacional, con el argumento de que no está justificado tal proyecto debido a la no muy alta incidencia delictiva en la zona.
Macaya señala, con amarga ironía, que el reciente atentado incendiario en la ruta 5 Sur se produjo a menos de 100 metros del terreno donde estaría ubicado la comandancia investigativa, de acuerdo a los compromisos institucionales asumidos en 2018.
Casi cinco años después, el proyecto del cuartel de la PDI sigue generando indignación local y un gran dolor de cabeza para el alcalde Macaya, quien aseguró que de una u otra manera el Gobierno aceptará y emprenderá la construcción.