Neimar Claret Andrade
Con la asistencia de autoridades políticas, empresas del sector energético y representantes
policiales de Malleco y La Araucanía, Frontel organizó un seminario sobre el robo de cables que
reunió experiencias, propuestas tecnológicas y la intención de articular una mesa de trabajo
público-privada para enfrentar este delito que afecta principalmente a zonas rurales.
Tras culminar la actividad, el seremi de Energía de La Araucanía, Camilo Villagrán manifestó que
“en primer lugar quiero felicitar esta instancia a la empresa Frontel por poder relevar con
conocimiento y con exposiciones de manera técnica, con datos concretos e invitando a todas las
instituciones para poder visibilizar este flagelo, que no solamente afecta en términos económicos
a la empresa distribuidora y a las empresas transmisoras de la región y de todo el país, sino que
aquí esta problemática afecta a las personas comunes y corrientes, especialmente a las personas
del campo, que ven interrumpida su vida cotidiana, su día a día, su normalidad”.
La autoridad recalcó que el robo de cables también “afecta a las APR y al sector rural, que además
de tener un problema de falta de suministro eléctrico, en algunos casos pueden tener la falta de
agua potable, a los niños y niñas que tienen que estudiar y a veces también se encuentran al día
siguiente con establecimientos educacionales sin suministro eléctrico o a veces algunas postas,
servicios de salud, porque efectivamente estos delitos se generan durante la noche y al otro día se
ven interrumpidas la vida cotidiana.”
Por su parte, el gerente zonal de Frontel en Malleco, Miguel Palacios Pino, coincidió en la urgencia
de unir esfuerzos público-privados y en la mayor incidencia del delito en el mundo rural y afirmó
que “hoy día nosotros estamos muy contentos por la concurrencia que hemos tenido y la conexión
público-privada que se da en este tipo de actividades donde nos unimos para solo un fin, que es en
el fondo ir atacando este flagelo; este delito no ocurre sólo en el centro urbano, ocurre 99% en la
zona rural.”
Desde el ámbito técnico, las empresas anunciaron medidas para desincentivar el hurto, entre ellas
la sustitución de conductor de cobre por conductores de aluminio y el uso de tecnologías de
protección en nuevas instalaciones.
En palabras de Palacios, “nosotros desde el mundo preventivo, o desde el mundo de nuestras
instalaciones, estamos construyendo con una mirada también en la prevención, de esa forma
estamos desincentivando el hurto de conductores en la región.”
En tanto, el alcalde de Angol, Enrique Neira dijo que “sin duda de que esto marca un antes y un
después. Para nosotros como municipio, dado el arraigo que tenemos en los sectores rurales,
podemos aportar, lógicamente, el liderazgo aquí lo va a tener que tener la empresa Frontel, que
nos pueda convocar, tener una mesa de trabajo, a lo menos una vez al mes, para poder evaluar los
sectores.”

