La nadadora chilena de aguas gélidas, Bárbara Hernández volvió a Magallanes para romper una nueva marca: el pasado domingo 5 de febrero completó el nado más largo jamás realizado por una persona.
Frente a la Base naval Capitán Arturo Prat, en la denominada Bahía Chile, en la isla Greenwich del archipiélago de las Shetland del Sur, la llamada “Sirena de hielo” completó 45 minutos con 50 segundos de nado que le permitió alcanzar 2,5 kilómetros de distancia, marca que será postulada para su validación como récord Guinness por la distancia.
Además, realizó la travesía solamente en traje de baño, soportando temperaturas de 2,9 grados en promedio, sin traje de neopreno ni grasa protectora.
Con este desafío, Hernández realizó un llamado a los líderes mundiales a actuar para garantizar la conservación del océano y del continente.
“Ha sido un gran honor nadar en esta parte del mundo tan increíble. Veo los cambios que están ocurriendo en nuestro océano y espero que a través de este nado pueda inspirar a las personas a tomar medidas para proteger esta área mágica de nuestro planeta”, manifestó la nadadora.
La expedición cuenta con el apoyo de la Armada de Chile, la Coalición Antártica del Océano Austral (ASOC), Banco de Chile, North Face, Garmin y Dryrobe. Tras su travesía, Hernández visitó la península Antártica y las bases de investigación antárticas chilenas en la Isla Rey Jorge.
La experiencia será registrada en una pieza documental, destacando el valor del territorio de la Antártida y su vida silvestre.