Neimar Claret Andrade
Don Juan Rodolfo Ñancucheo Silva, acompañado de su mamá Margarita Silva Pailahueque, estuvo en la sede principal de Las Noticias de Malleco en Victoria para denunciar que fue víctima de discriminación por parte de la médico del Cesfam de la ciudad, Mariel Isidora Letelier Reyes, quien según indicó, dijo que no atendería a nadie a su familia.
Según explicó, su hijo de tan sólo 3 meses de edad tiene todos los síntomas del Mal de Chagas, que es una enfermedad poco conocida en el sur de Chile, por lo que lo llevó al Cesfam de Victoria para que recibiera atención médica, tras solicitar una hora para tal fin.
En ese sentido dijo que como vive a una hora de la ciudad, llegó 13 minutos retrasado, por lo que la médico, Mariel Letelier, le dijo que no lo iba a poder atender por el retraso, pese a que don Rodolfo, según destacó, le explicó la situación del infante que además podría tener una desviación en la columna y presenta una infección bucal, por lo que el pequeño necesitaba de atención médica.
Sin embargo, la galena se negó rotundamente y pese a esto el padre del paciente le dijo que entonces le reagendara la hora, pero ella contestó que ese trámite debía hacerlo él directamente en el SOME, cosa que él hizo.
Su mamá, doña Margarita, quien es dirigente de la comunidad Pailahueque, se presentó en el Cesfam para pedir explicaciones sobre la falta de atención de su nieto, a quien le urgía ser visto por un doctor, pero la médico le contestó que ella se apegaba a los reglamentos y que ahora no iba a atender a ningún familiar de ella.
“Yo creo —consideró don Rodolfo— que eso está fuera de lugar, porque resulta que ellos son servidores públicos y no corresponde, en cierta manera, que esté diciendo que no va a atender, porque no es una clínica particular, eso es público y más encima se fue encima de un lactante, se puede decir, con sus dichos, porque no era para mí la atención, era para mi hijo que tiene 3 meses con toda la enfermedad que ya antes la había mencionado y para luego decirme sabe que no voy a atender ninguno de sus familiares, que eso me incluye a mí, incluye a mis sobrinos, que mi sobrina tiene una enfermedad bien extraña, también a mi padre que es mayor de edad”.
Asimismo aseguró que “esto molesta porque me sentí discriminado, la verdad; siempre se está hablando de la paz, de que busquemos la paz con el conflicto en mapuche, pero con personas como esa, se puede decir que esto nunca se va a completar porque yo me sentí discriminado y más encima después dice que se sentía agredida; yo no tengo, quizás, el nivel de estudio que ella tiene, yo solamente tengo 4° medio, ella tiene otro nivel, es doctora y entonces, yo creo, que como servidor público, ella tendría que tener la paciencia, la dedicación de entender los tonos, los problemas se pueden solucionar, creo que el horario también se puede reagendar, pero mi hijo, no digo que sea una excepción, pero lloraba bastante”.
Don Rodolfo Ñancucheo tuvo que llevar, finalmente, a su bebé a la urgencia del Hospital de Victoria para recibir la necesitada atención médica. “Me preocupa mucho que tenga Chagas, porque es una enfermedad directamente al corazón que implica muchas cosas, pero que me diga que no va a atender a ninguno de mis familiares: si yo no puedo ir a un consultorio que es netamente para personas del campo, ¿dónde más tendría que tocar la puerta?, yo no tengo los recursos para poder llevarlo en algo particular”.
Finalmente recalcó que “me siento completamente discriminado, esa es mi queja, de ella no tener la vocación de atender, la vocación de ser un servidor público, al parecer ella no entiende lo que es ser un servidor público y de no entender que el que se iba a atender, en ese momento, era un menor lactante con posible Chagas”.
				
															
