Redacción
Desde el año 2008, el Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, se encuentra aplicando medidas fitosanitarias en la región de La Araucanía para evitar el establecimiento de la polilla del racimo de la vid, también conocida como Lobesia botrana.
Es por ello que durante el mes de agosto se instalarán en parrones y árboles los emisores de confusión sexual, en las comunas mallequinas de Angol, Lumaco, Purén, Victoria, Traiguén, Curacautín y Collipulli; esta última comuna tiene la mayor cantidad de instalación de estos dispositivos con 190 hectáreas, el 70% de la ciudad de Collipulli.
La información fue dada a conocer por el coordinador regional del Programa Lobesia botrana en La Araucanía, Isaul Saavedra Vicencio, quien explicó que los emisores de confusión sexual son dispositivos que no provocan problemas a la salud de las personas y tampoco a los animales.
Su objetivo es producir una nube de feromonas para confundir a los machos, evitando que el insecto encuentre a la hembra para la reproducción, disminuyendo así las posibilidades de multiplicación de la plaga. Con esta y otras medidas fitosanitarias el SAG busca reducir las poblaciones del insecto en la región.
Asimismo recalcó que se recomienda a los vecinos de las casas donde se instalaron, los emisores de confusión sexual que no retiren o trasladen los dispositivos a otros lugares, ya que de ello depende la efectividad de la técnica.
Zonas urbanas
La directora del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), María Teresa Fernández, informó que gracias a las medidas adoptadas y al apoyo de la comunidad y productores, la polilla del racimo de la vid no se ha propagado a predios aledaños, encontrándose a la fecha sólo en zonas urbanas, por ello, la importancia de controlar y mantener la vigilancia de la plaga en estos lugares para evitar o disminuir su dispersión.
La directora regional agradeció a los vecinos y vecinas por su contribución y apoyo en la aplicación de emisores de confusión sexual, ya que gran cantidad de los dispositivos son instalados en los parrones caseros o árboles que tienen las familias en sus domicilios.