Neimar Claret Andrade
Esto, sin duda, no tiene nombre. La delincuencia está, desde hace rato, a la orden del día en Angol, así como en el resto del país, pero que se metan a hurtar los artículos que se usan para el cuidado de personas de la tercera edad que no tienen quién más se ocupe de ellos, es francamente el colmo.
Y es que recientemente unos desalmados se metieron, en horas nocturnas, en las bodegas del Refugio Emaús, ubicado en el 100 de la calle Jerusalén de la capital provincial y se llevaron pañales para adultos, artículos de limpieza y algunos materiales que se están utilizando en las labores de mejoramiento y construcción de esa dependencia social.
Su administradora, Yesenia López, relató que ellos descubrieron el robo a la mañana siguiente, porque desde el pasado mes de junio, los abuelitos que cuidan y todo su trabajo, se trasladó de manera temporal al 698 de Ilabaca, pues su sede permanente está siendo remozada, pero dejaron las cosas que ocupan para el cuidado de los adultos mayores, en la bodega de siempre.
Cuando llegaron, se percataron de que el vidrio de una de las ventanas de la bodega estaba roto y adentro estaba todo revuelto.
Afortunadamente, los residentes no estaban en el lugar y los antisociales sólo se llevaron lo que pudieron cargar e incluso dejaron, al pie del muro que los separa de la planta de revisión técnica y que, por las evidencias que quedaron, fue la ruta que usaron para irse, una bolsa con más insumos que no lograron sacar del lugar.
“No tengo idea de a cuánto asciende el daño —precisó Yesenia López— pero si siento que me robaron la tranquilidad y eso si que es más terrible. Ya estamos tratando de solucionar todo, vamos a dejar ahora a alguna persona pernoctando para que haya gente de día y de noche hasta que volvamos a mediados de agosto”.
La denuncia ya está cursada ante Carabineros, mientras que ya algunos angolinos de buen corazón han puesto manos a la obra para reponer el vidrio que rompieron los ladrones e incluso para instalar unas rejas de metal para dejar el lugar más resguardado.
Finalmente la Administradora del Refugio Emaús dijo que quienes quieran donar pañales para adultos, toallitas húmedas y detergente para reponer lo que perdieron, pueden acercarse a Ilabaca 698, en donde estarán recibiendo los donativos.
