Neimar Claret Andrade
1 hora 2 minutos y 59 segundos. Eso fue lo que duró el acto de juramentación del alcalde de Victoria, Javier Jaramillo y de los seis concejales para el período 2024-2028, que se llevó a cabo este viernes 6 de diciembre en el gimnasio del Liceo Jorge Alessandri y que empezó con media hora de retraso.
Jaramillo, con el objetivo de esquivar a los representantes de los medios de comunicación que lo esperaban en la puerta principal del recinto, ingresó al gimnasio por una puerta lateral y 15 minutos después de iniciado el acto, luego de que se confirmara, sólo 20 minutos antes de las 11 de la mañana, que la Corte de Apelaciones de Temuco denegó la orden de no innovar intentada por el Sernameg, para revertir la decisión del Juzgado de Garantía de Victoria de otorgarle las 2 horas de permiso para que asistiera a su juramentación.
Los alrededores del gimnasio del Liceo Jorge Alessandri estaban fuertemente custodiados por efectivos de Carabineros, mientras que las representantes de las agrupaciones feministas desplegaban sus lienzos pidiendo la salida de Jaramillo del sillón alcaldicio debido a que está siendo investigado por varios delitos de índole sexual.
Adentro, el recinto estaba plenado por los seguidores del jefe comunal, quienes gritaron cual fanáticos en un concierto de su estrella favorita, al verlo aparecer en el escenario, mientras que gritaban consignas para apoyarlo.
Luego de la juramentación de Jaramillo y los seis concejales Henry Canales, Denisse Dufey, Camilo Villablanca, Álvaro Salinas, Gabriel Toro y Ricardo Germany, el jefe comunal ofreció un improvisado discurso en el que resaltó sus logros y agradeció el apoyo de todos los presentes, al tiempo que afirmó que las mentiras sólo estancaban el progreso de la comuna.
Yo soy inocente
Al término del acto, los periodistas tuvieron que, literalmente, perseguir a Javier Jaramillo para conseguir sus declaraciones, mientras que eran activamente obstaculizados por los simpatizantes del edil que tuvo que retirarse rápidamente para no incumplir con la orden judicial que sólo le otorgó dos horas de suspensión de su arresto domiciliario total.
Sin embargo, antes de irse se logró que afirmara que “nosotros estamos muy contentos, agradecemos, por supuesto, que nos estén acompañando, agradecidos también de la comunidad; nosotros siempre hemos manifestado desde un inicio que creemos y confiamos en la justicia y que se va a desarrollar un proceso justo, un proceso correcto y nosotros creemos precisamente que así va a ser”.
Al ser consultado sobre cómo ejercerá su cargo mientras cumple con su medida cautelar, Jaramillo señaló que “hay situaciones administrativas que todavía tenemos que ir resolviendo durante este tiempo; seguimos nosotros confiando que vamos a tener un proceso justo, un proceso correcto, de donde vamos por supuesto, a confiar, sin duda, en que esto va a ser de buena manera. Yo soy inocente”.
El acto honorable que se convirtió en un panfleteo barato
El nuevo concejal, Camilo Villablanca Jara, quien fue el único de los ediles a quienes los seguidores de Jaramillo abuchearon por haber sido uno de sus críticos acérrimos, aseguró que la situación actual del cabecilla del Gobierno Municipal de Victoria “habla de lo mal que estamos hoy día, esto que era un acto solemne, un acto honorable, se convirtió en un panfleteo barato de campaña y yo considero que eso refleja lo que está mal”.
“Yo soy parte —aseguró— de ese 70 % que no decidió votar por este alcalde, sino que votamos por otra alternativa y que lamentablemente no ganamos. Hoy día nosotros tenemos un alcalde imputado, tenemos un alcalde que va a estar en la casa y que no va a poder trabajar, que no va a poder ejercer sus funciones”.
Villablanca, quien es abogado de profesión, manifestó con convicción que “nosotros vamos a esperar que pasen los 45 días, que van a ser en enero y vamos a solicitar la remoción del alcalde, que no quepa ninguna duda, porque el ejercicio público se ejerce en la calle, se ejerce en terreno, se ejerce con probidad y con transparencia, que es precisamente lo que no ha ocurrido acá”.
El edil recalcó que “yo fui al único que me pifiaron, porque lo vengo diciendo hace tres años y sin ningún temor, que las cosas acá se tienen que hacer bien y en eso yo creo que estamos todos de acuerdo. La justicia habló, la justicia generó un arresto domiciliario y nosotros no nos podemos quedar tranquilos con eso, vamos a pedir la remoción del alcalde una vez que pasen los 45 días, y eso va a ser en enero y no le vamos a tener miedo a la pifia, no le tenemos miedo a la presión, porque el 70 % de las personas no decidió tener un alcalde imputado”.
¿Y ahora?
Mientras Javier Jaramillo esté en su casa en arresto domiciliario total, la subrogancia la asumirá el administrador municipal, Manuel Cofré, mientras que las sesiones del Concejo Municipal las presidirá el concejal Henry Canales por ser el más votados con 1.810 sufragios a su favor.