Andrea Jaque
La Sociedad de Café y Lectura, que se reúne periódicamente para compartir literatura y abrir
espacios de diálogo, ha dedicado este año un lugar especial a la memoria de Gabriela
Mistral, al cumplirse ocho décadas desde que la insigne poetisa recibiera el Premio Nobel de
Literatura. En sesiones anteriores, sus integrantes debatieron y celebraron la obra
mistraliana, reconociendo su vigencia y su valor como herencia para las futuras
generaciones.
El cierre de la temporada tuvo como hito la presentación de Tranco Largo, antología que
reúne trabajos previos del autor e incluye una propuesta poética que llamó la atención por lo
erótico y lo existencial. En la ceremonia, Alfonso Medrano, integrante de la Sociedad de
Café y Lectura, ofreció palabras de introducción sobre la trayectoria del escritor y compartió
lecturas, subrayando el valor de estos encuentros como espacios donde los poetas dialogan
y se reconocen mutuamente a través de sus obras.

Patricio Gutiérrez Morales, de 53 años, agradeció la oportunidad brindada por la biblioteca y
compartió algunos de sus poemas, subrayando que la poesía es un oficio difícil, que exige
valentía frente a la hoja en blanco. “La poesía siempre debe ser verdad; el poeta habla de sí
mismo”, expresó, aludiendo a la sinceridad que atraviesa su obra. Sobre el título Tranco
Largo, señaló que representa un paso decisivo para mostrar un trabajo que pensó no
lograría ver la luz.
Con este acto, la Sociedad de Café y Lectura no sólo cerró su calendario anual, sino que
reafirmó su compromiso con la difusión cultural y la creación poética. En cada encuentro,
este colectivo ha demostrado que la literatura es un puente de unión y memoria, capaz de
convocar en torno a la palabra y a la reflexión compartida.

