Neimar Claret Andrade
La Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) realizó, en la SOFO Temuco, un seminario de Agricultura de Contrato y Calidad de Trigo, instancia en la que se reunieron varios representantes de la cadena trigo-harina-pan y que sirvió como primer acercamiento de cara a llegar a un acuerdo en cuanto al precio y la calidad del producto.
Al seminario asistieron representantes de productores asociados al gremio Agrícola Central, SOFO, Agricultores de Malleco, Agricultores Unidos, SNA y de la pequeña agricultura triguera vinculada al Programa de Cultivos Tradicionales de Indap, en conjunto con empresas y dirigentes de la molinería pertenecientes a los gremios Molineros del Centro y Molineros del Sur.
El presidente de la Asociación de Agricultores Unidos, Camilo Guzmán, manifestó que en la cita expusieron los diferentes actores para poder establecer ciertos acuerdos sobre la base de la agricultura de contrato.
“Lo que se concluyó de la actividad —comentó— fue básicamente que hoy día lo que está afectando el mercado de los cereales es el precio. Eso quedó claro en esta reunión. Los molineros por su parte, no quisieron referirse mucho al tema del precio, porque esto estuvieron muy recelosos, es más, algunos molineros como la Molinería Guzmán, dijeron claramente que eso era secreto industrial. Respecto a los demás molineros, hubo un rechazo a hablar de precios”.
En ese sentido Guzmán dijo que “trataron de llevar la reunión a la calidad. Nosotros reconocemos que hoy día hay un problema con la distribución de las calidades, hay muchos trigos que, a lo mejor, no dan las calidades industriales que ellos requieren en ciertas zonas de La Araucanía o del país, pero las calidades existen y es un mito de que el trigo importado es mejor que el trigo nacional”.
Asimismo señaló que el año pasado importaron trigo uruguayo a 350 pesos puesto en Chile y que este trigo obedece un criterio de calidad intermedio, por lo tanto ese precio es muy distante a los 200 pesos que pagaron por un trigo intermedio nacional. “Ahí se les cae inmediatamente el argumento de que efectivamente ellos tengan parámetros de calidad mucho más alto si están importando trigo”.
“Como conclusión —añadió Camilo Guzmán— Agricultores Unidos siempre colocó el problema de fondo sobre la mesa. Hicimos una presentación impecable, donde entregamos los problemas que existen hoy día con las asimetrías del mercado. Luego de eso tuvimos una reunión con el representante de la Subsecretaría de Agricultura y con él entregamos una propuesta a Cotrisa de realizar un plan de guarda para los pequeños agricultores, en el cual podamos sacar una importante cantidad de trigo del mercado nacional, poderla guardar en las bodegas de Cotrisa y poder empujar los precios por disminución de la oferta”.
Finalmente la Odepa valoró el acuerdo y compromiso alcanzado por los representantes de la cadena de transitar desde un modelo de comercialización spot de grano, hacia un modelo con base en la agricultura de contrato, en donde por un lado, los agricultores cuenten con un mayor grado de certidumbre respecto a los determinantes de los precios futuros del cereal y, por otro, la industria molinera pueda tener mayor certeza de las características y calidad de la materia prima que requieren para elaborar las harinas demandadas por la industria panadera.