La Cámara de Diputadas y Diputados rechazó en general la reforma tributaria, uno de los proyectos definidos como claves por La Moneda para poder llevar adelante su agenda de Gobierno.
El rechazo, totalmente inesperado hasta hoy, se concretó con 73 votos a favor, 71 en contra y tres abstenciones, en un votación que requería quorum simple.
Se estimaba que se iban a realizar cerca de 60 y hasta 70 votaciones por separado, en el caso de que se avanzara al debate en particular, pero el proceso no pasó de su primera etapa: la idea de legislar.
Tras extensos debates entre ayer y hoy, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, sufrió su mayor derrota política, frente a una oposición que había advertido que iba a rechazar la idea de legislar una “mala” reforma que -a su juicio- perjudicaría “gravemente” a la clase media y las pymes, y también que había reprochado una falta de apertura a recoger observaciones.
“Es una señal primero a una tozudez del Gobierno de no estar dispuesto a sentarse realmente a conversar; en la Comisión de Hacienda, durante un período largo no hubo prácticamente ningún tipo de flexibilidad”, comentó el diputado UDI Juan Antonio Coloma Álamos.
El gremialista remarcó que “el rechazo demuestra que no es solo de un sector político, es de quienes somos de derecha y también de centro”, ya que “se requería llegar a una mayoría que no se logró, creemos nosotros por la tozudez constante del Gobierno de no entender que era una mala reforma que afectaba a las pymes”.