España votó este domingo en unas elecciones anticipadas que estuvieron marcadas por el calor extremo y que arrojan unos resultados más ajustados de lo que indicaban los sondeos.
Con 100 % de los votos escrutados, el conservador Partido Popular (PP) liderado por Alberto Núñez Feijóo ganó por delante del Partido Socialista (PSOE) del actual presidente del gobierno, Pedro Sánchez.
El PP obtuvo 136 escaños, por 122 del PSOE.
El partido de extrema derecha Vox se situó en tercer lugar con 33 escaños y la coalición de izquierda Sumar en cuarto, con 31.
El Congreso de los Diputados tiene 350 escaños, por lo que se necesitan 176 para tener mayoría. Con los resultados actuales, ninguno de los dos grandes partidos puede gobernar en solitario.
A partir de este lunes comenzarán las negociaciones para pactos de investidura y quizás Sánchez podría repetir como presidente con el apoyo de Sumar y de fuerzas independentistas más pequeñas.
Pese a ganar, es muy complicado que Feijóo pueda llegar a ser presidente. Si no hay acuerdos, también es posible que se vuelvan a repetir los comicios en unos meses.
La formación de ultraderecha Vox de Santiago Abascal perdió 19 escaños en estas elecciones y se quedó con 33 diputados en el Congreso -lo que es la mayor bajada en toda la historia del partido en las elecciones-, mientras Sumar, la coalición de izquierdas encabezada por la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se situó como cuarta fuerza con 31 escaños, cuatro menos que los que obtuvieron sus antecesores, Unidas Podemos, en los anteriores comicios.
Con estos resultados, ninguno de los dos bloques de izquierda y derecha sumaría la mayoría absoluta que en España está fijada en 176 escaños.
La calculadora de los pactos
Tras el intenso recuento de votos, que deja un resultado más ajustado de lo que se preveía, empiezan los cálculos para ver quién podrá formar gobierno.
Los sondeos auguraban una victoria contundente del PP, pero sin mayoría absoluta, lo que le obligaba a recurrir a Vox en busca de apoyo para gobernar.
El PP llegaba de obtener resultados muy positivos en las elecciones regionales y locales del 28 de mayo, lo que llevó a Sánchez a adelantar los comicios de este domingo, en los que minimizó daños hasta el punto de que puede volver a intentar ser presidente.