Neimar Claret Andrade
En verdaderas pistas de barro y agua se han convertido los caminos de varios sectores de Lonquimay como Fusta Quinquén, Galletué y Marimenuco, por lo que quienes, como don Salvador Saavedra, deben transitar por ellos de manera constante, están clamando a las autoridades competentes que metan la mano y los reparen cuanto antes.
“Autoridades regionales, parlamentarios y a quienes tengan el deber de mantener la conectividad de los sectores de nuestra comuna y la región —aseguró don Salvador en su red social de Facebook— tengo la responsabilidad de todos los viernes y domingos trasladar alumnos internos a sus hogares y a su internado respectivamente. Mi pregunta es: ¿cuándo se repararan los caminos especialmente la Fusta Quinquén, Galletué, Marimenuco entre otros?”.
Asimismo indicó que si esperan que ocurra alguna desgracia que lamentar debido a la intransitabilidad de estas vías internas lonquimayinas.
El preocupado vecino advirtió que la situación se ha agravado por la falta de energía eléctrica en algunos sectores desde hace varios días, donde los habitantes están desconectados vía telefónica por falta del vital servicio eléctrico.
Finalmente Salvador Saavedra, quien aclaró que no es político ni tiene interés en serlo, dijo que espera que las autoridades “tomen conciencia y hagan su pega; cumplan con lo prometido, presionen al gobierno central, céntrense en lo importante, levanten la voz por su gente”.